CONSTITUCIÓN
Considerando: Que los entes vivos provistos de consciencia y provenientes de la fuente divina y/o de la fuerza creadora considerados individuos, indivisibles de su origen, que en el presente habitan en transportes denominados cuerpos humanos, en el espacio conocido como la Tierra.
Considerando: Que ciertos entes humanos, concretamente los que aprueban y suscriben esta declaración, son vehículos vivos de consciencia individual, consciencia unida e indivisible de la fuente divina, por y para la experiencia global de la fuente creadora, siendo esto una expresión divina.
Considerando: Que dichos entes humanos se encuentran actualmente sometidos a la experiencia de un mundo de ficción, concretamente para este caso, legal y/o jurídica, a través de instrumentos corporativos privados al servicio de agendas privadas que están bajo el control de seres aparentemente desconectados y/o alejados de la fuente original, imponiendo planes de confusión, control y sometimiento.
Considerando: Que este escrito puede ser entendido en su forma esencial y/o extensa, siendo en su forma esencial que ninguna de las unidades de transporte de consciencia puede ser considerada valor, ni ser incorporada a un instrumento corporativo denominado persona, también conocida en ocasiones como vessel, y que, dichas unidades de transporte de consciencia, tienen derecho a crear su propio ordenamiento jurídico en cualquier espacio de la existencia del orden divino.